«Hay tres cosas de las que estoy
completamente segura. Primera, Edward es un vampiro. Segunda, una parte
de él se muere por beber mi sangre. Y tercera, estoy total y
perdidamente enamorada de él.»
Cuando Isabella Swan se muda a
Forks, una pequeña localidad del estado de Washington donde no deja de
llover, piensa que es lo más aburrido que le podía haber ocurrido.
Pero su vida da un giro excitante y aterrador una vez que se encuentra
con el misterioso y seductor Edward Cullen. Hasta ese momento, Edward
se las había arreglado para mantener en secreto su identidad vampírica,
pero ahora ya nadie está a salvo, ni siquiera la persona a quien él
más quiere: Isabella.
Esta saga gira entorno a una
chica de diecisiete años, llamada Bella Swan, que se muda a una
pequeña localidad con su padre, porque su madre quiere viajar con su
nuevo marido, ya que es jugador de béisbol. Cuando llega está
triste ya que no le gusta estar allí, pero no quiere ser la causante
de que su madre se vuelve desgraciada, pero todo cambia cuando ve a
la familia Cullen y en concreto a Edward Cullen. La primera vez que
se ven es en el comedor del instituto y luego en la clase de biología
donde él se muestra distante hasta tal punto que sale casi corriendo
del aula antes de que acabe la clase. Al cabo de unos días en los
que está desaparecido aparece y dice que ha cambiado y que es un
poco más amable, pero le insiste a Bella en que no pueden ser amigos
porque Bella es una droga para él ya que su sangre le atrae más que
ninguna otra. ¿Conseguirá Edward acostumbrarse al olor de la sangre
de Bella o acabará por entregarse a sus impulsos de caza?
Esta
saga la descubrí cuando mi tía se leía los libros en verano y yo
lo pasaba con ella y al final terminamos viendo las pelis. Después
de terminar todas las películas en el cine, empecé a leerme los
libros y tengo que decir que no sé que me gusta más, si las
películas o los libros. Pero bueno a parte de que animo a todos a
que vean las películas esta reseña va sobre el libro, la verdad es
que el libro me encantó y me enganchó ya que la película también lo hizo,
aunque obviamente hay algunas cosas distintas.
Me gusta cómo Edward
controla sus impulsos de querer matarla y alimentarse porque para él,
Bella es su vida. Este libro es el claro ejemplo de la mente sobre el
cuerpo y esta novela es la historia sobrenatural más romántica que
he conocido y que más me ha gustado, y al igual que el Titanic o
Romeo y Julieta, Crepúsculo es un clásico, pero en este caso sobre vampiros, la historia es la que
queremos todas alguien que se sacrifique por nosotras y se enfrente a
todo y a todos por el amor.
Me gusta como se cambia
totalmente la imagen que todos tenemos de vampiros que solo se
alimentan de sangre matando a las personas indiscriminadamente como
Drácula. Estos vampiros son distintos ya que, aunque se siguen
alimentando de sangre, prefieren la de animales. Su piel sigue siendo
pálida pero brilla como diamantes y lo sorprendente de todo es que
GUAPÍSIMOSSS (sobre todo Edward y Emmet <3). Creo que este fue el primer libro sobre vampiros que he leído, y sí, ya lo sé, el primer libro que debería haber leído sobre vampiros tendría que haber sido Drácula, Vlad Drakul, de Bram Stoker, al ser el primer vampiro que se inventó en la historia, pero la verdad es que nunca me atrajo el primer vampiro psicópata que se alimentaba de sangre, pero siempre había tenido la idea del vampiro como a un ser al que no quería ver ni en pintura, pero al ver esta versión de los vampiros me entraron ganas de encontrarmelos a todos, y de tener alguno para mí igual que Bella.
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